S O N E T O A ARCOS de la FRONTERA
Está ARCOS de mi afecto muy
cercano
demostrado en los años de
ejercicio
en que la edad está plena de
juicio
aunque en lugar kilómetros
lejano.
Mi recuerdo constante,
cotidiano,
me presta con agrado su
servicio,
y, al normal inventario,
beneficio
de honroso apelativo, el de
paisano.
Una calle mi nombre tiene
puesto,
de lo que presumo abundantemente
por de poeta ser el manifiesto.
Si así lo pregonó el
AYUNTAMIENTO
no lo discutiré, importunamente,
y me quiten tan digno
tratamiento.
Córdoba, 4 de febrero 2007.
Ramón
VÁZQUEZ ORELLANA.
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