SONETO Al toro
En la dehesa, de plácido inquilino,
paraíso de holganza y verde vista.
y dando la propicia fina pista
al asunto, servir en lo taurino.
Una embestida le marcó destino
al proceso de ser protagonista
de un futuro que, a hierbas se conquista,
siguiendo, paso a paso, tal camino.
La plaza queda a vuelta de la esquina,
con ancestral vibrante disciplina
temple del TORO y del cuidado rito.
Le llegará la hora, en su momento,
para vivir instantes de infinito
forjado por torero sentimiento.
Ramón Vázquez
Orellana.
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