Los
Servicios Sociales han destinado durante el primer trimestre del año unos
30.000 euros para ayudar a las familias más necesitadas
La delegada de Servicios
Sociales, Saray Soria ha realizado un balance del trabajo y de las ayudas que
se solicitan desde el Centro Comunitario de los Servicios Sociales en el primer
trimestre del año. En este sentido, ha resaltado que la pandemia ha provocado
que muchas familias se hayan visto con situaciones de desempleo y en la que se
ha mermado su situación socio familiar. “El perfil de personas que acuden a los
Servicios Sociales va cambiando, y se han añadido personas que jamás antes
tenía que acudir a los servicios sociales” subrayaba la delegada. Con esto,
desde la propia delegación se espera que a medida que la situación pandémica
vaya mejorando, lo hagan también las familias que se han visto afectadas y que
puedan volver a su situación anterior.
Con todo esto, Saray Soria
también ha señalado que “desde el año pasado los contratos que se venían dando
desde los Servicios sociales por situaciones familiares se ha derivado a las
bolsas de empleo”. Además, ha subrayado que desde los Servicios Sociales “tenemos
el Plan Promete, regulado por unas bases, y las personas que accedan a un
contrato deben cumplir una serie de condiciones. Está destinado a cubrir las
necesidades básicas de las familias”. En este sentido, al realizarse menos
contratos se cuenta con mayor ayudas económicas, y en estos tres meses se han
invertido 9.500 euros en 300 familias en ayudas para alimentación, también se
han dado ayuda farmacéuticas, ayudas en torno a los 5.000 euros de aportaciones
para el pago de facturas, de suministros de agua, luz, bombona, etc. y
destinadas a unas 55 familias, a lo que habría que añadir los más de 15.000
euros de ayudas para suministros vitales como el alquiler, ropa, por
necesidades específicas, hipotecas. En total, las ayudas económicas directas
han sido de unos 30.000 euros.
En cuanto a estas ayudas,
Saray Soria ha explicado que son de dos tipos: una de contratos laborales de 5
horas, con el Plan Promete con unos requisitos específicos como la de familias
con hijos a cargo, familias monoparentales o personas solteras, etc., y ayudas
económicas para gastos específicos. En el caso del Plan Promete, se han ayudado
a 72 hombres y 72 mujeres que son un refuerzo para los servicios básicos que se
prestan desde el Ayuntamiento en limpieza viaria, parques y jardines y limpieza
de edificios. “Espero que en los siguientes meses muchas de estas familias no
tengan que recurrir a los servicios sociales porque significaría que su
situación personal o familiar ha cambiado, y me alegraría enormemente”, por su
parte a puesto en valor la dependencia “teníamos una asignatura pendiente con
la dependencia que tiene varios procesos para que se conceda, y cuyo
procedimiento puede rondar una media de dos años. Hay una parte que es la
valoración municipal, en la que teníamos una lista de espera debido a la falta
de personal, por eso se ha reforzado el personal destinado a la dependencia y
hemos conseguido que en menos de nueve meses hayamos acabado con la lista de
espera y hoy estamos al día. Una situación que además está haciendo que se
desbloqueen expedientes antiguos que necesitaban una revisión”.
Por último, Saray Soria ha
lamentado que “haya personas que fallezcan esperando su recurso de dependencia,
por lo tanto todo lo que está en nuestra mano desde el Ayuntamiento lo estamos
haciendo para reducir las listas de espera, y que la parte municipal esté al
día. Evidentemente de la parte que corresponde a otras administraciones no
podemos hacer nada” culminaba.