Las subidas del IBI en Grazalema se detendrán al proponer el
alcalde una reducción del valor catastral de las viviendas
"Con esta primera medida fiscal importante lanzamos
el mensaje de que cumpliremos con nuestros compromisos"
El pleno del
Ayuntamiento de Grazalema ha aprobado por unanimidad la propuesta del alcalde
de la localidad, Carlos Javier García, para reducir los valores catastrales del
municipio, de manera que "tal y como prometimos, quedarán congeladas las
subidas previstas de la contribución", afirmó el regidor en alusión al
Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
Esta medida
"se ha adoptado en el primer pleno ordinario de la legislatura, una medida
importante con la que lanzamos el mensaje de que cumpliremos con nuestros
compromisos", defendió el regidor grazalemeño. García recordó cómo
"el pasado 13 de junio, durante mi discurso de investidura, manifesté mi
intención de congelar e incluso reducir en un futuro algunas de las cargas
fiscales que soportan nuestras familias. Y esta es la primera medida a nivel
fiscal importante que considero conveniente adoptar".
En concreto, el
acuerdo plenario supone una reducción del 23 por ciento lineal de los valores
catastrales en Grazalema y Benamahoma y, en la práctica, significará la
paralización de la ponencia de valores aprobada en 2008, lo que logrará evitar
que en los años que quedan de aplicación de dicha ponencia, hasta 2019, se
produzcan los notables incrementos del valor de la contribución que hasta ahora
se han venido sucediendo.
"Desde 2016 el
IBI no subirá más. Y ello es posible gracias a que el Ayuntamiento de Grazalema
es una institución saneada, debido a una muy buena gestión económica realizada
en estos últimos años", precisó el alcalde. García añadió que "esta
congelación supone adaptar el valor catastral a la situación de crisis que
atravesamos, sin poner en peligro ni mucho menos el mantenimiento de los
servicios públicos que prestamos desde la administración local".
El regidor aclaró
que "esta medida ni mucho menos supone una bajada del precio de las
viviendas, porque nada tiene que ver el precio de mercado con el valor
catastral", añadiendo cómo, "por el contrario, las familias sí se
verán beneficiadas al tenerse en cuenta este valor del catastro para el cálculo
de otros impuestos, teniendo de este modo la medida también repercusiones
beneficiosas para las familias en el Impuesto de la Renta (IRPF), y otros como
el de Patrimonio, la
Plusvalía o el Impuesto de Transmisiones y Sucesiones".
De media, los
hogares grazalemeños se ahorrarán hasta 2019 unos 150 euros tras congelarse el
IBI y paralizarse de este modo la ponencia de valores: "Sabemos que
nuestros vecinos valorarán esta medida, que demuestra que somos un gobierno
sensible y humano”, concluyó el alcalde.
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