Deshacerse de las cláusulas suelo de los créditos hipotecarios y conseguir la devolución de las cantidades indebidamente cobradas se hace cada vez más factible.

Deshacerse de las cláusulas suelo de los créditos hipotecarios y conseguir la devolución de las cantidades indebidamente cobradas se hace cada vez más factible.

Unión de Consumidores de Andalucía llama a la ciudadanía a utilizar sus servicios por los beneficios que reporta el asesoramiento previo y el acceso a la justicia a  través de las asociaciones de consumidores y usuarios.

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Andalucía, 31 de enero de 2014. Tras el reconocimiento por los tribunales de la cláusula suelo como abusiva comenzaba la ardua tarea, en primer lugar, de identificar su presencia en las escrituras de los créditos hipotecarios, de posteriormente solicitar  su eliminación y de, finalmente, demandar a la entidad financiera la devolución de las cantidades indebidamente cobradas por esa cláusula. Unas devoluciones que, afortunadamente los tribunales van reconociendo de manera reiterada por la poca transparencia demostrada en la colocación de las mismas.

Aunque las sentencias en diferentes instancias se fueron sucediendo, fue un fallo del Tribunal Supremo el que permitió que miles de hogares pudieran comenzar a deshacerse de esta abusiva cláusula suelo. Pero la realidad actual es que contando con más información, cada vez son más las personas consumidoras que se percatan de que tienen en sus escrituras dicha cláusula y es cuando se plantean la oportunidad de batallar por su eliminación así como de reclamar en justicia las cantidades indebidamente cobradas. Este es el momento en el que es absolutamente recomendable la intervención, mediación e incluso el acceso a la vía judicial a través de la cobertura de una organización de consumidores como UCA-UCE, por los beneficios que ello reporta. Pues si bien es cierto que las entidades ya no pueden hacer uso de la cláusula, en la mayor parte de los casos las demandas de la ciudadanía se están centrando en reclamar la devolución de cantidades cobradas en exceso e injustamente por su aplicación.

De esta manera, en los últimos meses, desde la Unión de Consumidores se están atendiendo puntualmente, a través de nuestra red de oficinas, tanto la solicitud de información como las denuncias individuales que se nos están presentando y cuyos resultados satisfactorios se están empezando a recoger. Y a pesar de que demandar la solicitud de devolución de las cantidades indebidamente cobradas puede resultar muy costoso a nivel individual, muchos son los beneficios que se pueden obtener utilizando la intervención de una asociación de consumidores de usuarios.

 Afortunadamente muchas entidades se han visto obligadas a eliminar estas cláusulas; a otras, se les está requiriendo que lo hagan pero, en todos los casos, es un clamor la necesaria reparación del daño causado. Y esta es la línea que, poco a poco, va abriéndose paso en los tribunales que en sus fallos están considerando que la declaración de nulidad de la cláusula suelo llevará consigo los correspondientes efectos restitutorios, pues como regla, nuestro sistema jurídico parte de la ineficacia de los contratos – o de algunas de sus cláusulas –, y si el contrato subsiste, como en la mayoría de los casos ocurre, corresponde destruir sus consecuencias y borrar sus huellas como si estas cláusulas suelo no hubiesen existido, evitando así que de los mismos se deriven efectos de acuerdo con la regla clásica “quod nullum est mullum effectum producit” (lo que es nulo no produce ningún efecto). Así lo dispone el art. 1303 del Código Civil y con esa premisa están trabajando nuestros gabinetes jurídicos pues, declarada la nulidad de una obligación, los contratantes deben restituirse recíprocamente las cosas que hubiesen sido materia de contrato, con sus frutos, y el precio con los intereses.

Desde la Unión de Consumidores queremos poner en valor el trabajo que venimos realizando como organización de consumidores con las innumerables eliminaciones de cláusulas suelo, las condenas en costas contra las entidades financieras en estos procedimientos y las reclamaciones de cantidades para reparar los daños ocasionados por la aplicación de estas injustas Condiciones Generales  que las entidades financieras han venido aplicando contra los consumidores. Al respecto está siendo significativamente positivo el aporte de la Ley General de Consumidores y Usuarios por el valor que en las sentencias judiciales está suponiendo que los jueces tomen en consideración que los usuarios sean la parte más débil en la contratación de un crédito hipotecario y que afortunadamente comiencen a aplicar el principio “pro consumidor”.  

Cualquier consumidor afectado puede ponerse en contacto con la Unión de Consumidores de Cádiz con el fin tratar de exponernos su caso y que le defendamos frente a este abuso bancario. Para ello, pueden llamar al 956265822 con el fin de que nuestros abogados les atiendan.

Para más información: 956 26 58 22

Miguel A. Ruiz: 671 04 86 25