viernes, 10 de mayo de 2013

Profesionales de Atención a la Ciudadanía obtienen un premio nacional por un trabajo sobre asistencia sanitaria 2.0 en la Sierra


Profesionales de Atención a la Ciudadanía obtienen un premio nacional por un trabajo sobre asistencia sanitaria 2.0 en la Sierra

La teledermatología ha motivado que el 61% de las consultas hayan sido resueltas sin necesidad de desplazamiento, mientras que 110 menores se han beneficiado de la telepediatría

Profesionales de Atención a la Ciudadanía de la Sierra de Cádiz han obtenido en el IX Simposium de la Sociedad Española de Atención al Usuario de la Sanidad (SEAUS), celebrado el pasado fin de semana en Sitges (Barcelona), el premio al mejor póster sobre la asistencia sanitaria 2.0 en esa comarca gaditana y sus resultados desde su implantación, en 2011.
El trabajo de José Enrique Sánchez Basallote (encargado de defenderlo en el simposium), Manuel Ángel Chacón González, Pedro José Fernández García y Manuel Martín Macias da a conocer los resultados, desde su implantación en 2011, de la teledermatología en los centros de Ubrique y Villamartín con el hospital de referencia, el Virgen de las Montañas de este último municipio, y de la telepediatría en los consultorios de Benaocaz y Villaluenga en coordinación con los pediatras del centro de salud ubriqueño.
La ponencia incide en que los recursos tecnológicos permiten que la atención sanitaria se pueda realizar a distancia, resultando, especialmente útil para zonas rurales o de difícil acceso, como es el caso de la Sierra de Cádiz. Así, la teleasistencia permite a los profesionales sanitarios adoptar decisiones clínicas reduciendo el tiempo de espera y la repetición de pruebas diagnósticas para la detección de las enfermedades, consiguiendo la aplicación del tratamiento más adecuado y, sobre todo, evita a los pacientes el desplazamiento de su consultorio al centro de salud o de cualquiera de los dos al hospital de referencia.
Teledermatología y telepediatría
El sistema de la teledermatología, implantado en Villamartín y Ubrique en coordinación con el hospital concertado con el Servicio Andaluz de Salud (SAS) Virgen de las Montañas, está basado en la metodología diferida, consistente en que ante la indicación de teleconsulta por un médico de familia, se recoge la información clínica necesaria, se selecciona un área o lesión y se fotografía en el propio centro de atención primaria por parte de profesionales de enfermería. De este modo, las fotografías -generalmente dos por lesión- se cargan en una aplicación informática y remiten al Servicio de Dermatología del Hospital de Villamartín; allí es el especialista quien valora y decide el tratamiento a seguir o determina si es necesario que sea valorado en la propia consulta del hospital, para lo cual facilita una cita en función de la prioridad de la lesión.
Desde su implantación se han realizado 365 consultas de teledermatología, de las que el 61% han sido resueltas por un profesional sin necesidad de desplazamiento por parte del paciente.
En cuanto a la telepediatría, implantado en Villaluenga y Benaocaz -dos municipios con amplia dispersión geográfica-, se basa en que un día a la semana, el médico de familia comunica al pediatra del centro de salud referente, el de Ubrique, mediante videoconferencia y en presencia del pequeño y de su acompañante los signos y síntomas que presenta el paciente pediátrico y el pediatra, al momento, emite un juicio clínico y plantea la actitud y el tratamiento a seguir. Además de la comodidad para el usuario este sistema fomenta un espacio común de participación entre los familiares, el menor y el médico de familia. Desde 2011, se ha realizado un total de 110 consultas sobre una población pediátrica de 145 menores.
Además del trabajo premiado, el Servicio de Atención a la Ciudadanía de la Sierra ha concurrido con dos más a la cita de Sitges: uno sobre el proceso de selección de ciudadanos para las comisiones de participación ciudadana en las unidades de gestión clínica y otro sobre el desarrollo de dos grupos socioeducativos con mujeres de entre 30 y 65 años (los conocidos como GRUSE-M) en 2012. 

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