GESTIONES PARA AMPLIAR EL SERVICIO DE BOMBEROS


GESTIONES PARA AMPLIAR EL SERVICIO DE BOMBEROS
Gambín y González se desplazaron ayer a Cádiz para tratar diversos asuntos con Diputación

El alcalde de Arcos, Isidoro Gambín, acompañado de la delegada municipal de Hacienda, María José González, se desplazó ayer a la sede de la Diputación provincial de Cádiz para mantener una reunión de trabajo con el Diputado del área de Servicios Económicos, Hacienda y Recaudación, Juan Carlos Ruiz Boix.
En este encuentro se trataron, entre otros asuntos, la liquidación de impuestos anual y la deuda con el Consorcio de Bomberos, procedente ésta del ejercicio del 2014. La cifra adeudada está en torno a los 500.000€, que el Ayuntamiento de Arcos va a pagar en mensualidades a través de Diputación.
Además, se abordaron aspectos concernientes a la ordenanza de Seguridad Ciudadana. “En el primer trimestre del año 2020 se actualizará el convenio con Diputación y nos incluirán el servicio de este tipo de sanciones”, según ha señalado el Alcalde.
Por último, los representantes municipales solicitaron la ampliación del número de bomberos en el municipio para reforzar el servicio de guardia, así como la concesión de un vehículo pequeño para posibles intervenciones en el Casco Antiguo.



NUEVO DÍA


EL MANZANO
Hace mucho tiempo existía un enorme manzano. Un pequeño niño lo amaba mucho y todos los días jugaba alrededor de él. Trepaba al árbol hasta el tope, comía sus manzanas y tomaba una siesta bajo su sombra.
El amaba al árbol y el árbol amaba al niño. Pasó el tiempo y el pequeño niño creció y el nunca más volvió a jugar alrededor del enorme árbol. Un día el muchacho regresó al árbol y escuchó que el árbol le dijo triste: "¿Vienes a jugar conmigo?". Pero el muchacho contestó: "Ya no soy el niño de antes que jugaba alrededor de enormes árboles. Lo que ahora quiero son juguetes y necesito dinero para comprarlos".
"Lo siento, dijo el árbol, pero no tengo dinero... Te sugiero que tomes todas mis manzanas y las vendas. De esta manera tú obtendrás el dinero para tus juguetes". El muchacho se sintió muy feliz. Tomó todas las manzanas y obtuvo el dinero y el árbol volvió a ser feliz. Pero el muchacho nunca volvió después de obtener el dinero y el árbol volvió a estar triste.
Tiempo después, el muchacho regresó y el árbol se puso feliz y le preguntó: "¿Vienes a jugar conmigo?". Dijo él: "No tengo tiempo para jugar. Debo de trabajar para mi familia. Necesito una casa para compartir con mi esposa e hijos. ¿Puedes ayudarme?"... " Lo siento, pero no tengo una casa, pero... tu puedes cortar mis ramas y construir tu casa". El joven cortó todas las ramas del árbol y esto hizo feliz nuevamente al árbol, pero el joven nunca más volvió desde esa vez y el árbol volvió a estar triste y solitario.
Cierto día de un cálido verano, el hombre regresó y el árbol estaba encantado. "Vienes a jugar conmigo?, le preguntó el árbol. El hombre contestó: "Estoy triste y volviéndome viejo. Quiero un bote para navegar y descansar. ¿Puedes darme uno?". El árbol contestó: "Usa mi tronco para que puedas construir uno y así puedas navegar y ser feliz". El hombre cortó el tronco y construyó su bote. Luego se fue a navegar por un largo tiempo.
Finalmente regresó después de muchos años y el árbol le dijo: "Lo siento mucho, pero ya no tenga nada que darte ni siquiera manzanas". El hombre replicó "No tengo dientes para morder, ni fuerza para escalar... Por ahora ya estoy viejo". Entonces el árbol emocionado le dijo: "Realmente no puedo darte nada.... la única cosa que me queda son mis raíces muertas". Y el hombre contestó: "Yo no necesito mucho ahora, solo un lugar para descansar. Estoy tan cansado después de tantos años".
"Bueno,las viejas raíces de un árbol, son el mejor lugar para recostarse y descansar. Ven siéntate conmigo y descansa". El hombre se sentó junto al árbol y éste, feliz y contento, sonrió con lágrimas.
(Moraleja: Esta puede ser la historia de cada uno de nosotros. El árbol son nuestros padres. Cuando somos niños, los amamos y jugamos con papá y mamá... Cuando crecemos los dejamos, sólo regresamos a ellos cuando los necesitamos o estamos en problemas. No importa lo que sea, ellos siempre están allí para darnos todo lo que puedan y hacernos felices. Tú puedes pensar que el muchacho es cruel contra el árbol, pero es así como muchos de nosotros tratamos a nuestros padres.)
Autor desconocido