El Ayuntamiento de Arcos pone en marcha la campaña ‘En Navidad no regales animales’

El Ayuntamiento de Arcos pone en marcha la campaña ‘En Navidad no regales animales’



La protectora de animales Asosa colabora con la iniciativa
El delegado de Medio Ambiente, Diego Carrera junto a la delegada de Participación Ciudadana, Saray Soria y la voluntaria de la protectora de animales Asosa, Celia Guerrero han dado a conocer la citada campaña cuyo objetivo es el de concienciar a la ciudadanía de la responsabilidad que se adquiere a la hora de regalar una mascota.
En este sentido, Diego Carrera ha explicado que “regalar una mascota conlleva unas obligaciones, y no queremos ver que en los próximos meses muchas de estas mascotas sean abandonadas”.
De la misma forma, la delegada de Participación Ciudadana, Saray Soria ha explicado que "hay que colaborar o hacer conciencia desde las instituciones, reforzar el trabajo que hace la protectora en pro de estos animales". Con ello, ha resaltado el trabajo que viene realizando Asosa de ayuda a los animales que se abandonan, y ha realizado un llamamiento "para que no se utilice a los animales domésticos como un juguete", con esto, ha pedido responsabilidad a la hora de regalar una mascota.
Por último, Celia Guerrero como voluntaria de la protectora Asosa, ha explicado que la campaña la están realizando en estos días de Navidad, y el pasado viernes se trasladaron hasta el barato. Con esto, también ha pedido concienciación a la hora

BUENOS DESDE ARCOS DE LA FRONTERA A TODO EL MUNDO

Las mujeres más hermosas del mundo no son las que desfilan en trajes de baño y vestidos de noche delante de jueces y de cámaras de televisión. 

Las verdaderas finalistas y las ganadoras son aquellas que tienen el brillo interno de la gracia y el perdón. 

No hay belleza física que se pueda comparar con la dignidad espiritual o el atractivo de una mujer llena de paz. 

Es una persona serena porque su confianza y su seguridad están en la paz que reflejan. 

Es una persona con dignidad porque su valor y sentido se hallan en algo más allá de lo superficial. 

Esa mujer reflejará una clase de belleza interior que hace mucho más que llamar la atención a sí misma. Es una belleza que es mucho más importante que cualquier cosa trivial. 

La verdadera belleza de la mujer no es corruptible, porque no depende de lo físico, sino que es la belleza de una forma de ser que reúne la quietud, la humildad, la ternura y la serenidad. 

Las mujeres del mundo son alabadas por su belleza física, por su vivacidad y por su audacia. 

Pero las mujeres de Dios tienen un molde distinto. 

La belleza física de una mujer es temporal, y su deterioro le producirá amargura. 

En cambio, el adorno de un espíritu manso, dulce y sereno no es una moneda perecible, no se gastará por el uso ni está sujeta a los valores del mercado. 

No deja marcas en el alma, ni heridas en quienes la rodean. 

Esta es la verdadera belleza, la belleza que es de grande estima delante de Dios.