domingo, 31 de enero de 2016
BUENOS DÍAS DESDE ARCOS DE LA FRONTERA A TODOS EL MUNDO
Esta
historia es sobre un hombre que reflejaba en su forma de vestir la derrota, y
en su forma de actuar la mediocridad total.
Ocurrió
en París, en una calle céntrica aunque secundaria. Este hombre, sucio,
maloliente, tocaba un viejo violín.
Frente
a él y sobre el suelo estaba su boina, con la esperanza de que los transeúntes
se apiadaran de su condición y le arrojaran algunas monedas para llevar a casa.
El
pobre hombre trataba de sacar una melodía, pero era del todo imposible
identificarla debido a lo desafinado del instrumento, y a la forma displicente
y aburrida con que tocaba ese violín.
Un
famoso concertista, que junto con su esposa y unos amigos salía de un teatro
cercano, pasó frente al mendigo musical.
Todos
arrugaron la cara al oír aquellos sonidos tan discordantes. Y no pudieron menos
que reír de buena gana.
La
esposa le pidió, al concertista, que tocara algo. El hombre echó una mirada a
las pocas monedas en el interior de la boina del mendigo, y decidió hacer algo.
Le
solicitó el violín. Y el mendigo musical se lo prestó con cierto recelo.
Lo
primero que hizo el concertista fue afinar sus cuerdas.
Y
entonces, vigorosamente y con gran maestría arrancó una melodía fascinante del
viejo instrumento. Los amigos comenzaron a aplaudir y los transeúntes comenzaron
a arremolinarse para ver el improvisado espectáculo.
Al
escuchar la música, la gente de la cercana calle principal acudió también y
pronto había una pequeña multitud escuchando arrobada el extraño concierto.
La boina se llenó no solamente de monedas, sino de muchos billetes de todas las
denominaciones. Mientras el maestro sacaba una melodía tras otra, con tanta
alegría.
El
mendigo musical estaba aún más feliz de ver lo que ocurría y no cesaba de dar
saltos de contento y repetir orgulloso a todos: "¡¡Ese es mi violín!!
¡¡Ese es mi
violín!!". Lo cual, por supuesto, era rigurosamente cierto.
La
vida nos da a todos "un violín". Son nuestros conocimientos, nuestras
habilidades y nuestras actitudes. Y tenemos libertad absoluta de tocar
"ese violín" como nos plazca.
Sé
nos ha dicho que Dios nos concede libre albedrío, es decir, la facultad de
decidir lo que haremos de nuestra vida. Y esto, claro, es tanto un maravilloso
derecho, como
una formidable responsabilidad.
Algunos,
por pereza, ni siquiera afinan ese violín. No perciben que en el mundo actual
hay que prepararse, aprender, desarrollar habilidades y mejorar constantemente
actitudes si hemos de ejecutar un buen concierto.
Pretenden
una boina llena de dinero, y lo que entregan es una discordante melodía que no
gusta a nadie.
Esa
es la gente que hace su trabajo de la forma: "hay se va...", Que
piensa en términos de "me vale...", y que cree que la humanidad tiene
la obligación de retribuirle su pésima ejecución, cubriendo sus necesidades.
Es
la gente que piensa solamente en sus derechos, pero no siente ninguna
obligación de ganárselos.
La
verdad, por dura que pueda parecernos, es otra.
Tú
y yo, y cualquier otra persona, tenemos que aprender tarde o temprano, que los
mejores lugares son para aquellos que no solamente afinan bien ese violín, sino
que aprenden con el tiempo también a tocarlo con maestría.
Por
eso debemos de estar dispuestos a hacer bien nuestro trabajo diario, sea cual
sea. Y aspirar siempre a prepararnos para ser capaces de realizar otras cosas
que nos gustarían.
La
historia está llena de ejemplos de gente que aún con dificultades iniciales
llegó a ser un concertista con ese violín que es la vida. Y también, por
desgracia, registra los casos de muchos otros, que teniendo grandes
oportunidades, decidieron con ese violín, ser mendigos musicales.
La
verdad es que Dios nos concedió "libre albedrío". Tú puedes hacer
algo grande de tu vida, o hacer de ella algo mediocre. Esa es tu decisión
personal.
LO
NEGATIVO: Negarnos a afinar bien nuestro violín de la vida. Y quejarnos de que
la gente no disfrute la melodía que sacamos de él.
LO
POSITIVO: Comprender que, nos guste o no, solamente rosperaremos si afinamos
bien ese violín, y aprendemos a sacar de él las mejores melodías.
sábado, 30 de enero de 2016
Aqualia premia el mejor trabajo periodístico sobre “La gestión integral del agua en los municipios”
Aqualia premia el mejor trabajo periodístico sobre
“La gestión integral del agua en los municipios”
Presentado el I Premio periodístico de
Aqualia con la colaboración de la Asociación de Periodistas de Información Ambiental
(APIA)
El certamen, cuyo plazo de candidaturas ya
está abierto, nace con el objetivo de concienciar acerca de la importancia que
el agua tiene en el desarrollo de las sociedades y la necesidad de garantizar
su sostenibilidad
Madrid, 04 de diciembre de 2015
Aqualia acaba de lanzar la primera edición su
premio periodístico sobre “La gestión integral
del agua en municipio” que nace con el objetivo de concienciar a los
profesionales de la comunicación y, en
general a toda la sociedad, de la
importancia que una eficiente gestión del ciclo integral del agua tiene para el
desarrollo de las sociedades y, por lo tanto, de la necesidad de garantizar
la sostenibilidad medioambiental, financiera y social de estos servicios.
Podrán optar al premio los trabajos publicados entre el 1 de enero de
2015 y el 29 de febrero de 2016 en
medios de comunicación españoles, en soporte prensa, radio, televisión,
impresos y/o digitales. Los géneros periodísticos que podrán aspirar al
premio son las informaciones y/o reportajes relacionados directamente con la
difusión del objeto del certamen. Esto eso, se reconocerá la labor del
periodista cuyo trabajo refleje la importancia de la gestión del ciclo integral
del agua en la vida cotidiana incrementando de este modo la cultura del agua
como bien escaso y preciado.
El jurado estará integrado por representantes
de Aqualia, periodistas de FAPE (Federación de Asociaciones de la Prensa de
España) y de APIA, representantes de la FEMP (Federación Española de Municipios
y Provincias) y AEAS (Asociación Española de Abastecimientos de Agua y
Saneamiento). Ellos concederán un primer
premio, de 3.000 euros y dos accésit, de 1.500 euros cada uno. Los premios
no podrán ser divididos ni compartidos.
El
plazo
de presentación de candidaturas se abrió
el martes 1 de diciembre y concluye el 7 de marzo de 2016 a las 24.00 horas.
El fallo del jurado se dará a conocer durante ese mismo mes de marzo y el
premio se entregará coincidiendo con el Día Mundial del Agua, el próximo 22 de
marzo.
Todos los detalles sobre el modo de envío de
los trabajos y bases del concurso
pueden consultarse en la página web de Aqualia, http://www.aqualia.es/aqualia/wcm/idc/groups/public/documents/document/mdaw/mdgy/~edisp/cscp100725.pdf
Aqualia es la empresa de gestión del
agua de FCC, uno de los grupos de servicios ciudadanos líderes en Europa. La
compañía es la primera española de su sector, la tercera empresa privada de
agua de Europa y la sexta en el Mundo, según el último ranking de la
publicación especializada Global Water
Intelligence (GWI), y atiende a 22,5 millones de usuarios.
En la actualidad
presta servicio en 1100 municipios de 22 países: España,
Italia, Portugal, República Checa, Polonia, Rumanía, Montenegro, Bosnia,
México, Perú, Chile, Uruguay, Argelia, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Arabia
Saudí, Serbia, Kosovo, Túnez, Uruguay, Catar e India. En el último ejercicio, la
Compañía facturó 954 millones de euros y alcanzó una cartera de negocio récord
de más de 15.000 millones de euros.